El Círculo de Empresarios ha publicado una infografía que resume un estudio realizado por The Conference Board en el que se preguntaba a 1500 empresarios/ejecutivos de todo el mundo (de ellos 60 españoles) por las lecciones que habían aprendido de la pandemia y cómo veían el futuro. Creemos que es un informe interesante porque esta recopilación de experiencias puede ayudar a muchas empresas españolas para definir sus objetivos a corto y medio plazo.
En primer lugar, el informe resalta las cinco estrategias prioritarias en las que están centradas en el 2021 las empresas:
- Acelerar la transformación digital.
- Mejorar la innovación.
- Modificar su modelo de negocio.
- Menores costes.
- Agilización de procesos.
La tecnología ayuda tanto a reducir costes como a mejorar procesos
Si las analizamos con cierto detalle, veremos que estas cinco estrategias tienen un factor común: necesitan de tecnología y cultura digital para conseguirlas. La tecnología ayuda tanto a reducir costes como a mejorar procesos, pero también abre nuevas posibilidades y contribuye al cambio del modelo de negocio digital que está siendo la salvación de muchas empresas en esta etapa turbulenta.
Además, las soluciones tecnológicas son, por definición, innovadoras ya que mejoran lo anterior y requieren estar siempre actualizadas. Por eso contribuyen a impulsar la innovación que es uno de los ejes de las empresas para su transformación digital. Pero sigamos con el informe para ver si nos da más pistas.
Cuando se les pregunta cuáles son los principales obstáculos para cumplir en 2021 esos objetivos la lista es la siguiente:
- Disrupciones relacionadas con la COVID-19.
- Falta de talento cualificado.
- Escasez de recursos para cubrir las necesidades de la empresa.
- Falta de cultura innovadora.
- Regulación.
Analicemos cada uno de ellos a la luz de nuestra experiencia.
La falta de talento cualificado es sin duda una limitación, pero mientras las empresas van renovando su talento pueden apoyarse en empresas externas que le ayuden en esa transformación y al mismo tiempo sus propios trabajadores, viendo las ventajas y la sencillez de las nuevas soluciones, harán lo posible por estar a la altura. El cambio por la evidencia es siempre más sencillo que el cambio por la imposición.
El de la escasez de recursos se basa en una estimación errónea de lo que cuesta en el mundo digital hacer cambios de gran impacto. Las soluciones pueden ir escalando, lo que permite empezar por productos precisos y eficaces, de bajo coste, que resuelvan el centro del problema, para ir aumentando su funcionalidades a medida que producen resultados e ingresos o ahorros de costes. Conceptos del mundo digital como el Mínimo Producto Viable y la experimentación, permiten empezar por soluciones rápidas y económicas con las características suficientes para satisfacer a los clientes iniciales y proporcionar retroalimentación para el desarrollo futuro y completo.
Ésta es la base de las soluciones en las que creemos. No nos volvemos locos con la tecnología, la usamos para resolver problemas, priorizando lo esencial, una vez que con ayuda del cliente entendemos claramente los obstáculos que tiene.
Hacer cosas nuevas que mejoren es ya una innovación
La falta de cultura innovadora está muchas veces asociada a la falta de retos, al miedo al cambio o a la falta de un entorno que lo estimule. Todos tenemos la experiencia de personas que resuelven situaciones complejas en su vida o en sus hobbies y que, sin embargo, en sus empresas parecen autómatas, sin iniciativa. Todo ser humano es por definición creativo e innovador porque es lo que nos caracteriza como especie y lo que nos ha traído hasta aquí. Son las culturas las que paralizan estas capacidades. La solución es empezar de abajo a arriba. Hablamos de ello en un post sobre cómo se puede “infectar” una organización de cultura digital y la mejor manera es desde la evidencia de cambios precisos y a pequeña escala. Eso elimina poco a poco el miedo a la transformación y da pie a pensar en otros problemas que pudieran tener una solución similar. Esto es ya innovación: hacer cosas nuevas que mejoren. Se necesita un primer paso y confianza para los siguientes.
En Interacso hemos vivido estas situaciones y visto con satisfacción estos cambios. Por eso nos gusta escribir sobre ello, porque sabemos que esos obstáculos que han enumerados los CEOs y ejecutivos en este informe están en la cabeza de la mayor parte de las organizaciones.
La infografía del Círculo de Empresarios incluye también como síntesis final las 5 principales lecciones aprendidas por ejecutivos de: Canadá, Estados Unidos, Japón, China, Alemania y España y que se concentran en:
- Mantener la calma.
- Actuar rápido.
- Capacidad de adaptación.
- Flexibilidad.
- Desarrollo tecnológico.
Al final muestran un pensamiento que viene a decir: hay que estar preparado para cualquier eventualidad y hay capacidad tecnológica para enfrentarla. La pandemia ha demostrado muchas cosas que antes eran solo hipótesis o estaban solo en fase de piloto: que se puede ser eficaz con el teletrabajo; que es posible enseñar online; que las reuniones pueden ser más cortas y eficientes; que se podrían reducir muchos viajes de negocios y los costes asociados; que la tecnología digital es esencial y debe estar siempre a punto y que los trabajadores son capaces de adaptarse a situaciones impensables sólo hace un año.
La pandemia ha hecho más por la transformación digital. Nos ha hecho actuar rápido, como individuos, como empresas y como especie. En ninguna época de la Historia el ser humano sería capaz en solo un año de haber realizado los cambios que se han hecho en este tiempo para mantener en lo posible su economía a flote al tiempo que afrontaba el riesgo sanitario.
Una vez vista y vivida esta pandemia podemos decir que nada es imposible.
